Mateo 11:28
Propósito: animar a los oyentes a aceptar la invitación de
Jesús a descansar en el de las fatigas y el duro trabajado que la vida nos
presenta, describiendo primero la fatiga y algunas de sus causas, y presentando
la opción de ir a el para un descanso real.
Introducción
1. Una
de mis profesoras hace una terapia antes de comenzar su clase con nosotros: con
ejercicios específicos nos invita a dejar los problemas que podemos andar
cargando. Es interesante ver que todos los alumnos respondemos positivamente,
lo cual demuestra que todos estamos luchando con algunas cosas.
2. Hoy
hablaremos de las cargas como generadoras de ansiedad, y al mismo tiempo,
trataremos de saber si Dios nos quiere ensenar algo mediante la ansiedad.
3. Jesús
hizo una invitación que no se puede leer ni oír en ningún otro lado: Si están
cansados, vengan para hacerlos descansar. El dijo esto a una sociedad que tenia
posiblemente mas problemas que nosotros, donde la pobreza era extrema y las
enfermedades abundaban según los testimonios del NT. Y en la que además, la
esperanza de vida era de 35 a 50 años. La mayoría de nosotros habría muerto. A
ese tipo de personas, Jesús les hizo semejante invitación.
4. Que
le parece que alguien le diga en este momento, ven, vamos a resolverte ese
problema. ¿Qué pasaría en su psicología?
I –
TRABAJADOS Y CARGADOS
A – ¿Qué quiso
decir Jesús con trabajados y cargados?
1- Trabajados, sentir fatiga, trabajar
duro, atormentarse. Exhaustos. En todos los testimonios del NT se refiere a un
trabajo pesado, y en algunos casos, que agobia al ser humano, que causa fatiga,
Mt.6,25-34, 11.28, Lc.12,27.
2- Cargados, es una palabra que se agrega
para dar fuerza a la idea de fatiga. Cargados es una palabra que se usaba para
referirse a la carga que se colocaba sobre un animal o un barco, es decir, una
sobre carga, algo exagerado que causa una gran fatiga.
B – ¿Que puede
estar causándonos fatiga?
1- Una persona puede causar fatiga, carga,
Mt.26>10. El hostigamiento
constante es razón de agobio, y por lo tanto, de estrés.
2- El
trabajo
3- Una
enfermedad propia o de un ser querido.
4- Una
situación social, o una circunstancia especifica.
C –
Generalmente no somos conscientes de la fatiga, el estrés y la ansiedad que
podemos estar sobrellevando. Solo nos damos cuenta hasta que recibimos un
efecto secundario, como una enfermedad, como la diabetes. ¿Quisiera llevar paz hoy a su corazón? ¿Le
gustaría sentirse libre de eso que le causa presión?
II – VENID A MI…
A – Al creyente
le corresponde la decisión de hacer el cambio en su vida. Nadie puede tomar la decisión de resolver tu
situación personal, solo tú.
B – Si nos
guiamos por estas palabras de Jesús, nuestras grandes frustraciones solo pueden
tener una causa, estamos muy alejados de él. Mientras mas lejos, mas agobiado y
estresado vivirás.
C – ¿Qué pasa
cuando nos acercamos a el?
III – HALLARAN DESCANSO…
A – Descanso es
una palabra que en el idioma griego indica cesar,
es decir, parar del trabajo. Es la acción de renunciar a la fatiga, a aquello
que nos molesta.
Recordemos
alguna ocasión en la que llegamos cansados a nuestra casa y fuimos a nuestra
cama y nos tiramos sobre ella, echamos nuestro peso allí, y de inmediato
sentimos el alivio.
B – Es muy
conocido el cuento del campesino que iba cargando una gran porción de leña,
paso por el camino un conductor, y al sentir pesar por el viejo, lo invito a
subir a su camioneta. El campesino subió, pero algunos kilómetros después, el
conductor vio, con asombro, que el viejo campesino iba de pie y cargando la
leña aún. El conductor le dijo que no hiciera eso, que pusiera la leña en el
carro. La respuesta del campesino fue: ya es bastante con que me lleve a mí,
como para que encima tenga que llevar mi leña también.
La mayoría de
nosotros somos así, hemos sido invitados por Jesús a descansar, y seguimos empeñados
en seguir cargando nuestros problemas, nuestros temores.
C – Jesús dice
que la forma de encontrar esta paz es cargando el yugo que el nos ofrece. Un
hombre que cargaba un yugo lo hacía sobre sus hombros, como en el caso de
Jeremías, 27:2. El judaísmo interpretó esta carga como el acto de cumplir con
la ley de Dios. Cuando uno se entrega al Señor y reconoce su reino, también
acepta el yugo de la obediencia sobre sus hombros. La obediencia a la palabra
nos da el descanso que tanto queremos para nuestras vidas.
Nuestro
cansancio bien puede estar relacionado con nuestra falta de voluntad de
entregarnos a la obediencia. Salomón escribió: “El fin de todo el discurso oído
es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del
hombre.” Ecl.12:13, RV60.
CONCLUSION
1- Quizás
estés pasando por momentos difíciles y te sientes cansado. Las duras luchas de
la vida te han robado la paz. Si es así, es la condición correcta para
entregarle tus cargas a Jesús.
2- Si
alguien te dice, ven, resolvamos tu problema, que haces, le dices, no, déjame
seguir con esta carga y esta angustia, ¿quiero seguir sufriendo? Claro que no.
Jesús hoy te dice, quiero que descanses.
3- Mi
profesora dijo, que traen, que dejan, que se llevan. Tu traes tu ansiedad, tu
cansancio, eso es lo que debes dejar, renunciar a ello, y llevarte la paz de
Jesús.
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