Gálatas 5:16-21
PROPÓSITO: Describir las generalidades de una vida
controlada por la naturaleza humana, e invitar a dejarnos guiar por el Espíritu
de Dios, para vivir en pleno desarrollo de nuestra vida.
INTRODUCCIÓN:
1 - Usted tiene
dos mascotas, a una la alimenta bien, a otra la alimenta de vez en cuando,
¿cuál de las dos tendrá más fuerza, más vida?
2 - Pablo habla
de la batalla que está librando el cristiano, los enemigos son el Espíritu y La
carne. Triunfará el que reciba más atención de nuestra parte.
I – UNA
BATALLA PERMANENTE, Gál.5:16-8
A - Somos invitados a vivir según
la guía del Espíritu, Vs.16,18.
B – La
oposición entre el Espíritu y la carne es una batalla que libra el cristiano
constantemente, cuando no ha rendido por completo su vida al control del
Espíritu, V.17.
C – “No
satisfagan”: la invitación de Pablo es a “no llevar a feliz término los
apetitos carnales”, esto puede indicarnos que está bajo el control de nuestra
voluntad el dominio de nuestra vida.
1 – Solemos
decir, “Se me salió el indio”, pero en realidad, nosotros teníamos la llave de
la puerta donde estaba ese indio.
2 – Tal vez
recordemos cosas que no queríamos hacer, pero las hicimos. Quisiéramos meternos
en una máquina del tiempo, regresar a ese momento, y evitar el error que
cometimos: dije una palabra incorrecta por ser impulsivo, tuve un arrebato de
cólera y después sentí mucha vergüenza, traté mal a esa persona que tanto
quiero y después me arrepentí, etc.
3 – Según
Pablo, el dominio de nuestra vida está en nuestra voluntad, “No satisfagan”.
I – ES EVIDENTE A QUIÉN OBEDECEMOS, Vs.19-21
A – Es fácil
ver lo que hacen quienes siguen los malos deseos…
1 – La
conducta natural es la forma más baja de vida, es esa cuando el ser humano no
ha escalado ni un poco en su existencia, y vive bajo los instintos más bajos y
comunes. Estas prácticas revelan a quienes no tienen ningún tipo de dominio de
su vida.
2 – la lista
inicia con las “inmoralidades sexuales”, adulterio, fornicación, trastornos de
la personalidad, porque estas conductas demuestran el lado más instintivo del
ser humano. La sexualidad es uno de los
instintos más primitivos de la humanidad. LAMENTABLEMENTE, EL CONTEXTO ACTUAL
ESTÁ CONDUCIENDO LA CONCIENCIA DE LA HUMANIDAD AL ABISMO DE LA SEXUALIDAD, no
solo dándole mayor poder a las minorías con trastornos de personalidad, sino
atacando de forma directa la familia y la identidad de las personas. En el
versículo 23 se habla de DOMINIO PROPIO, lo cual se refiere al control que
tenemos sobre nuestros “malos deseos”, y uno de los primeros sentidos del
dominio propio, es el control que podemos ejercer sobre nuestros deseos
sexuales.
Hoy más que
nunca es urgente que nos mantengamos en la pureza que nos da el Espíritu y que
estemos vigilantes con relación a nuestros
hijos para que no se desvíen del camino de Cristo.
B – Conductas
que son mala levadura: “Mantienen odios, discordias y celos.
Se enojan fácilmente, causan rivalidades, divisiones y partidismos.”
Odios, se traduce de una palabra que es el antónimo del amor ágape, el
cual es el amor de Dios. Quien mantiene este tipo de odio, está en el lado
opuesto a Dios, aunque justifique su odio con muchas razones. “Discordia”
falta de acuerdo entre personas cercanas o que se relacionan de algún modo.
1 - Fui
miembro de una iglesia muy contenciosa, gracias a Dios, renuncié a ella en
2004. Un tiempo se mantuvo un pleito de dinero, el ambiente era tenso, y el
asunto llegó incluso a los medios de comunicación, como radio y periódicos.
Llegó hasta iglesias en Estados Unidos. Se vivió un ambiente muy carnal en esos
días.
2 - En esa
misma iglesia, había un hombre belicoso, muy contencioso, estaba involucrado
casi en todos los pleitos que se generaban, e incluso, fue miembro de varias
congregaciones en la ciudad, pero en cada una de ellas, dejaba un mal recuerdo:
mantenía un espíritu de contienda.
Celos,
existen celos buenos, pero este que describe Pablo es ese sentimiento que
arruina y es motivo de problemas. Pueden llevar hasta la muerte.
Se enojan
fácilmente o se enojan fácilmente… El enojo es un estado emocional
que varía en intensidad. Varía desde una irritación leve hasta una furia e ira
intensa. Como otras emociones, está acompañada de cambios psicológicos y
biológicos. Cuando usted se enoja, su frecuencia cardíaca y presión arterial se
elevan y lo mismo sucede con su nivel de hormonas de energía, adrenalina y
noradrenalina. LA ABIBLIA SE REFIERE ACÁ
AL ENOJO QUE DESTRUYE.
C – Si usted
muestra estas conductas constantemente, usted es carnal, vive sometido a sus
bajos deseos y al control de su naturaleza.
III – DESECHANDO LA INMUNDICIA DE LA CARNE
A – Primero
necesito conocerme, saber identificar mis reacciones, mis conductas malas y
buenas. La vida es un desastre cuando no sabemos reconocernos a nosotros
mismos. Es como vivir en punto ciego. Si vivimos en punto ciego, nos ofendemos
cuando alguien nos llama la atención, porque otros pueden ver lo que nosotros
hacemos y nosotros no lo percibimos. APRENDA A CONOCERSE.
B – Recuerde
varias cosas que han ocurrido desde que llegó a Cristo:
1 – Usted ha
nacido de nuevo, Jn.3:5.
2 - Ha renunciado a ese hombre viejo viciado y
corrupto, 2 Cor 5, 17; Ef.4:17ss.
3 - Hemos
muerto con Cristo, Ga.2:20. En este sentido, «en Cristo» es una metáfora que
expresa una nueva identidad personal y una nueva orientación hacia la vida: el
tipo de vida que deriva de un «trasplante de Espíritu».
4 - En la
iglesia recibimos la educación necesaria para nuestro cambio, hagamos caso de
la Palabra predicada y salgamos a practicarla
CONCLUSIÓN:
1 - Abandonar este tipo de
conductas es una muestra clara del trabajo que hacemos en nosotros mismos. Quien no se trabaja a sí mismo, desperdicia
la oportunidad de tener una vida mejor.
2 – Nacer de nuevo incida el
reinicio de nuestras vidas, abandonando aquellas características malas de la
naturaleza humana, y asumiendo la personalidad que nos proporciona el Espíritu
de Cristo.
3 - Oremos: Espíritu Santo, toma control total de
mi vida, lléname de tu fruto con todas sus semillas, que mi vida florezca bajo
tu guía, y que el viejo hombre muera completamente en mí. En el nombre de
Jesús, amén.
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