EL JUSTO POR LA FE VIVIRÁ


2Cor.5:7
En la fe caminamos, no en la realidad vista.  SA

Propósito: Motivar a la asamblea a vivir una vida extraordinaria, basados en una vida sobrenatural mediante la fe.

INTRODUCCIÓN.
  1. Como cristianos somos llamados a una vida sobrenatural, y no a conformarnos con lo que nos rodea.
  2. ¿Es posible vivir milagrosamente en la actualidad? Muchas iglesias aseguran que no existen los milagros, pero veamos lo que nos enseña las Escrituras.

I-     EL SEÑOR SEÑALA EL TIPO DE VIDA QUE DEBEMOS VIVIR.
A. “Mi justo por la fe vivirá; pero si se vuelve atrás, no estaré contento de él.” He.10:38. DHH
B. “En la fe caminamos, no en la realidad vista.” 2Cor.5:7 SA.[1]
C. No es un simple sentimiento expresado en la Biblia, es lo que Dios espera de todos los que hemos creído. ¿Acaso no es la fe un sistema de vida sobrenatural? La fe se opone a lo natural, es lo imposible hecho realidad, y cuando lo imposible se vuelve real, también se puede llamar MILAGRO. Hemos sido llamados, entonces, a vivir una vida milagrosa, sobrenatural, basada en la fe.
II-    LA REALIDAD, ENEMIGA DE LA FE.
A.   La realidad es en lo que más creemos. Si vemos la enfermedad, la pobreza, las circunstancias difíciles, llegamos a hundirnos en la desesperación.
1.    Hay una hermana que tiene elefantiasis, y se ha diagnosticado que su mal la acompañará hasta que muera, según los médicos, esta mujer no tiene posibilidades de sanar. Por eso alguien dijo que el diablo viene vestido de médico, porque ellos solo dan malas noticias.
2.    Un muchacho agoniza en el hospital víctima de la leucemia, tuberculosis, insuficiencia renal, ceguera. Esta es su realidad. Él es creyente, ¿debe resignarse a un diagnóstico de muerte? Si observamos la realidad, sí, él está muerto.
3.    Mr.6:35-37 cuenta el episodio de la angustia de los discípulos por la alimentación de miles de personas. ellos no podían alimentar a la muchedumbre, su razón les decía que lo más lógico era mandar a las personas a los lugares más cercanos para que compraran comida y se alimentaran. Lo mismo haríamos nosotros.
4.    Acá vemos realidades físicas que se enfrentan a nuestra fe, y nos hacen vacilar.
B.    Lamentablemente, la mayoría de personas de iglesias viven según la realidad que les rodea, y por eso es casi imposible que logren obtener una forma de vida superior. ¿Cómo puede esperar vivir una vida sobrenatural alguien que se aferra a lo que ven sus ojos? La Biblia dice que este tipo de conducta es desagradable al Señor. He.11:6.
C.    Veamos las cosas desde arriba, no desde abajo. Ver las cosas desde abajo es situarnos en lo que estamos atravesando y ver los desafíos como gigantes invencibles contra los cuales no podemos ganar.  Ver las cosas desde arriba es ver las cosas como Dios las ve, insignificantes, pequeñas, indignas de combatir contra nosotros.
III- EN LA FE CAMINAMOS, NO EN LA REALIDAD VISTA. 2Cor.5:7.
A.   La Biblia explica que la fe es la certeza de lo que se espera. La palabra "certeza" significa “base" o "título de propiedad".
1.    La fe es la base de lo que nosotros deseamos. Si tenemos en cuenta que la base es fundamental para que un edificio se afirme sobre la misma, la fe es fundamental para que podamos llevar a cabo nuestra vida cristiana devocional con éxito.
2.    La fe también se asimila a un título de propiedad. ¿Qué es un título de propiedad? Es un papel en el que figura la pertenencia de un cierto terreno, un edificio o una casa, según corresponda. Por lo tanto, la fe es tu título de propiedad, de aquellas cosas que esperas recibir, ya son tuyas, te pertenecen, porque tienes el título de propiedad de esas cosas: la fe.
B.    La fe es el sentimiento de que nuestros deseos ya se han realizado en la realidad física. Precisamente, el Señor, al ver nuestra fe, nos bendice diciendo: "Y como creíste, te sea hecho". Si al orar, logras observar y visualizar algo que se encuentra fuera del mundo físico, no te detengas, pero sigue manteniendo ese nivel de oración, pues ese es el tiempo y la oportunidad de derribar cualquier argumento de lo imposible. Aún hoy Jesús nos dice: “Todo es posible si uno cree.” Mr.9:23.
C.    A la vez, la fe funciona con el poder de la confesión. Si pretendemos creer, pero hablamos de una forma contraria a lo que esperamos recibir, difícilmente el poder del Espíritu del Señor puede trabajar en nuestra vida. En una ocasión, Jesús dijo: “Les digo, ustedes pueden orar por cualquier cosa, y si creen que lo han recibido, será suyo.” Mr.11:24, NTV. Por lo tanto, la declaración es importante para materializar nuestra fe. Todo lo que nosotros podemos ver primero fue un deseo, (fe), posteriormente, fue palabra, y el deseo como la palabra concursaron para materializar lo que solo estaba en la mente.
D.   Es bueno y deseamos que se haga la voluntad de Dios, pero muchas veces este tipo de expresiones pueden ser la manifestación de la duda y el temor: Puedo conseguir una casa, pero no sé todavía, “que se haga la voluntad de Dios”; o, tiene una enfermedad incurable, nosotros queremos que se sane, “pero que se haga la voluntad de Dios”, como si Dios quiere que las personas estén enfermas. Estas son manifestaciones de inseguridad y temor.
E.    Lamentablemente, muchas iglesias no creen en los milagros, dicen que ya no existen. Gente que piense así jamás verá algo milagroso, porque sencillamente no cree que algo sobrenatural pueda pasar. Aunque un pensamiento como ese contradice de forma directa lo que dice la Biblia: “Todo es posible si uno cree.”

IV- ¿POR QUÉ ALGUNAS VECES NO OCURREN LAS COSAS QUE DESEAMOS?
A.   Primero, debemos ser fieles al Señor, Dios no puede bendecir generosamente a alguien que no le es fiel a él y a su palabra, Jos.1:8.
B.    Segundo, un corazón cargado de malos sentimientos es incapaz de recibir lo bueno del Señor, Hch.8:20-23.
C.    Tercero, quien no da fruto no puede recibir generosamente, ¿Qué esperamos recibir si no estamos dispuestos a dar?
D.   Cuarto, porque la fe y la palabra no coinciden. La declaración de los deseos es vital para la activación de lo sobrenatural.

CONCLUSIÓN:
1.    Una vida que se conduce por fe demuestra su dependencia de Dios en todos los sentidos.
2.    Renunciemos a la imposibilidad y a lo que nuestros ojos ven.
3.    Ayer recibí una buena noticia: una joven que tenía cáncer se ha curado. Hace algunos años fuimos testigos de la recuperación de otra niña con leucemia. Y yo me pregunto, ¿por qué vamos a resignarnos a la imposibilidad cuando tenemos el recurso de la oración para escalar las montañas más altas?
4.    No permitamos que las circunstancias nos ahoguen. Vivamos en este mundo caminando de la mano del poderoso gigante invisible: Dios.


[1] La versión de Serafín de Ausejo  nos da una mejor idea sobre vivir por fe cuando traduce así. 

Comentarios

Adolfo Ibarra. ha dicho que…
preciosa ensenanza.Compartamos la PALABRA y ensenemos a su pueblo a vivir por FE